Hoy vamos a elaborar un pan integral con semillas y nueces de la forma tradicional, sin panificadora. Con una fermentación lenta, muy poca levadura y pre-fermento o poolish.
El poolish se prepara con 50 gr de harina de espelta integral, 55 mL de agua y medio gramo de levadura para pan en polvo, mezclamos todo en un bol, se tapa con un paño y se deja en una zona cálida de la cocina.
¿A qué tiene una pinta fantástica? La base de la masa es la misma de este pan de espelta y centeno integral, sin embargo el proceso es diferente.
Algunas personas me han pedido la elaboración de este pan por mensajes privados en Instagram, así que, a petición popular voy a poner todos los pasos.
Pan integral de semillas y nueces
Ingredientes
- 200 gr Harina de espelta integral
- 150 gr Harina de centeno integral
- 150 gr Harina de fuerza integral
- 300 mL Agua reposada
- 1 cda Miel virgen
- 30 mL Aceite de oliva virgen extra
- 5 gr Sal yodada
- 5 gr Levadura fresca o 3 de seca
- 20 gr Semillas de lino y chía molidas
- 30 gr Nueces picadas
Elaboración paso a paso
- En primer lugar elaboraremos un pre-fermento unas 4h previas.En una amasadora añadiremos todos los ingredientes y lo amasaremos en velocidad baja durante 25-30 minutos.
- Cuando observemos que la masa está compacta, se despega de las paredes de la amasadora o a coger un trozo y estirarlo queda como un chicle, ya está lista.
- En un bol que habremos untado en aceite de oliva o harina, haremos una bola y lo pondremos tapado con un paño. Lo guardaremos en el frigorífico unas doce horas.
- A la mañana siguiente, sacaremos la masa, la bolearemos un poco y la pondremos sobre un papel vegetal untado en AOVE.
- En el microondas meteremos un bol con agua y lo pondremos a hervir, lo sacaremos e introduciremos la bola de masa durante 2 ó 3 horas.
- La masa aumentará de volumen casi el doble. Pre-calentaremos el horno 15 minutos con calor arriba y abajo a 220º C con dos flaneras de metal o barro y agua en su interior. (vapor)Y la bandeja de metal dentro, para que se caliente.
- Con cuidado greñaremos la superficie del pan con un cuchillo de sierra, espolvoreamos con harina y lo pondremos con el mismo papel sobre la bandeja caliente que hemos sacado del horno.
- Yo le pongo dejando 3 cm de espacio entre en pan una caperuza de papel de aluminio, como si fuera un sobrero, pero sin tocar el pan. Durante 25 minutos, después lo retiro.
- Durante el resto del tiempo bajo el horno a 200ºC y los últimos 3 minutos pongo el ventilador.
- Una vez cocido el pan, lo dejo enfriar sobre una rejilla.
En el ámbito de la nutrición se habla mucho sobre el pan, y si es adecuado tomarlo de forma habitual o no.
Bajo mi punto de vista, el pan tiene poca calidad nutricional, (aporta calorías, pocos nutrientes y no es saciante) de hecho es normal el picoteo de pan, ¿será adictivo? 😉
Lo ideal es aportar los hidratos de carbono de tu alimentación con comida nutritiva, frutas, verduras, legumbres y tubérculos.
Yo no lo consumo de forma habitual, pero cuando lo hago, trato de elaborarlo en casa es de mejor calidad, después lo congelo en rebanadas y lo tengo disponible para varios días.
Aunque bien tapado con un paño, se conserva perfectamente, aunque ya no está crujiente…
El pan contiene gluten y de vez en cuando tomar un pan de buena calidad mejora mi tolerancia al gluten, ya que mueren bacterias que mejoran la digestión del gluten cuando dejas de tomarlo durante mucho tiempo.
Por lo tanto, si dejas de tomar pan o gluten de forma definitiva, te provocará molestias cuando lo ingieras en algún momento puntual.
Espero que os haya gustado la receta de hoy, y como siempre que difundáis por redes.
¡Hasta la pronto! 🙂